No sé muy bien cómo empezar a describir todo lo que quiero expresar. Hoy quiero empezar por ser yo quien explique qué es lo que necesito y de que manera.
-Siento miedo, estoy triste e indecisa. No me soporto ni a mí misma- los días pasan y todos son iguales: acabo por meterme en mi cama hasta el nuevo amanecer. Pero ha llegado el día en que he decidido que no quiero que esto siga siendo así. Hoy, quiero pasarme quince minutos bajo el agua caliente de la ducha. Hoy, no quiero hablar, no quiero pensar ni preocuparme de lo que tenga que decir. Por eso, esta noche tan solo se me antoja dormir bajo la "medusa" rosa y blanca, siempre y cuando te encargues de mantenerme toda la noche bien tapada y protegida. Y que, a la mañana siguiente, me levante con ganas de hablarle al mundo y decirle que sigues siendo mía.
lunes, 23 de abril de 2012
domingo, 22 de abril de 2012
La mecánica del corazón.
"Cuando tengo mucho miedo, noto que la mecánica de mi corazón patina hasta el punto que parezco una locomotora de vapor en el momento en que sus ruedas chirrían en una curva. Viajo sobre los raíles de mi propio miedo. ¿De qué tengo miedo? De ti, en fin, de mí sin ti. El vapor, pánico mecánico de mi corazón, se filtra por debajo de los raíles".
jueves, 23 de febrero de 2012
One and only.
+ ¿Tienes un minuto?
- Claro, dime.
+ Bueno, gracias, solo es un minuto. ¿Sabes todo lo que se puede hacer en un solo minuto?
- Un minuto es muy poco.
+ Un solo minuto puede arruinarte la vida, o, todo lo contrario, puede hacerte feliz para siempre. Pero en tu caso no sé cómo será. Un minuto, sesenta segundos y dos palabras que decir. Quizás, sean las dos palabras que más me cuesten decirte en toda mi vida, porque quizás sean las dos palabras más sinceras que hayan salido por esta boca. Pero allá voy, me lanzo: te quiero. Te quiero por muchas cosas. No me preguntes por qué. Es así, y punto. Se me acaba el tiempo. Me quedan unos segundos para demostrarte que todo lo que te digo no es mentira. Porque en un minuto me haces feliz. Y en menos tiempo también. Porque eres una de esas personas extrañas; que entran en tu vida sin permiso y cogen las riendas de tus pensamientos. Dame un beso; un minuto y te demostraré cómo puedo pensar en ti de sesenta formas diferentes...
- Claro, dime.
+ Bueno, gracias, solo es un minuto. ¿Sabes todo lo que se puede hacer en un solo minuto?
- Un minuto es muy poco.
+ Un solo minuto puede arruinarte la vida, o, todo lo contrario, puede hacerte feliz para siempre. Pero en tu caso no sé cómo será. Un minuto, sesenta segundos y dos palabras que decir. Quizás, sean las dos palabras que más me cuesten decirte en toda mi vida, porque quizás sean las dos palabras más sinceras que hayan salido por esta boca. Pero allá voy, me lanzo: te quiero. Te quiero por muchas cosas. No me preguntes por qué. Es así, y punto. Se me acaba el tiempo. Me quedan unos segundos para demostrarte que todo lo que te digo no es mentira. Porque en un minuto me haces feliz. Y en menos tiempo también. Porque eres una de esas personas extrañas; que entran en tu vida sin permiso y cogen las riendas de tus pensamientos. Dame un beso; un minuto y te demostraré cómo puedo pensar en ti de sesenta formas diferentes...
lunes, 23 de enero de 2012
Someone like you.
"No importa cuánto tiempo quede. Esto para mí es un sueño infinito. Un beso por cada te quiero, miles de abrazos haga frío o calor, una sonrisa por cada sonrisa, miradas que hacen que mi boca no diga nada...miradas que lo dicen todo. Besos que me dejan sin sentido. Caricias que hacen que me corra un escalofrío por todo el cuerpo. Es amor, algo tan bonito que te hace tanto daño. Pero que le da sentido a cada día que pasa."
Más de trescientos sesenta y cinco días pasarán para demostrar que el amor dura. Dicen que a veces duele, pero yo siempre me quedaré con la frase “quien bien te quiere, te hará llorar”. No importa, nunca me quedaré con estos, casi inexistentes, recuerdos. Tan solo servirán para darme cuenta de cómo debo sobrevivir, aprender y escuchar, en más de una ocasión, todos los consejos que me proporcionas. Y, de esa forma, esas lágrimas harán que de alguna manera llegue a recordar todas y cada una de las pequeñas cosas que, día a día, he ido aprendiendo.
Te quiero.
sábado, 24 de diciembre de 2011
once más uno.
Otro mes más, se me antoja seguir a tu lado. Y pienso, y existo, y me digo: ¿seguirá a mi lado, este vicio, estos sentimientos, esta rutina y esta felicidad de ahora en años?
Puede que tenga que acostumbrarme a muchos puntos y aspectos que conllevan una vida en común, a dejar de pensar por mí misma y empezar a pensar la mitad, y,a la vez, el doble.
Puede que tenga que dejar de desperdiciar todos los minutos que se escapan pensando en: ¿Y sí...?, para centrarme en lo que de verdad es importante.
Pero decidí ser la primera persona en pisar tierra firme, sobre tus curvas, y sin ningún tipo de dudas. Porque somos nosotros mismos quienes ponemos los límites, pero he decidido ser yo quien deba cruzarlos y burlarme de lo que consideramos como imposible.
Así que, por ahora, seguiré vagando sobre mi luna particular...
Brownie de chocolate, once.
Puede que tenga que acostumbrarme a muchos puntos y aspectos que conllevan una vida en común, a dejar de pensar por mí misma y empezar a pensar la mitad, y,a la vez, el doble.
Puede que tenga que dejar de desperdiciar todos los minutos que se escapan pensando en: ¿Y sí...?, para centrarme en lo que de verdad es importante.
Pero decidí ser la primera persona en pisar tierra firme, sobre tus curvas, y sin ningún tipo de dudas. Porque somos nosotros mismos quienes ponemos los límites, pero he decidido ser yo quien deba cruzarlos y burlarme de lo que consideramos como imposible.
Así que, por ahora, seguiré vagando sobre mi luna particular...
Brownie de chocolate, once.
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