domingo, 22 de mayo de 2011

Súmale treinta.

-Hola,cariño.
+Hola,cosa.
-¿Recuerdas qué día es hoy?
+Claro que lo recuerdo, ¿Cómo podría olvidarlo?
-Ah,no sé.Yo solamente te pregunto.

Acaba de entrar por la puerta de casa, me agarra por la cintura y mantenemos esta conversación. Tras su última frase, sonríe de manera suspicaz, me besa y se desprende de mis curvas. Sigo cocinando puesto que, desde las ocho que ha salido de casa, tiene que estar muerta de hambre; literalmente.
Regresa y la duda le corroe, ya que no le he contestado directamente a la pregunta o no le he dado la respuesta que esperaba, lo que quería escuchar.
Vuelve y revuelve todo lo que pilla. Pasa cerca de mí y picotea la comida, me enfado puesto que aún no nos hemos sentado a comer y ya anda picando de todo un poco. Le hace mucha gracia picarme, sabe que no me gusta y lo hace aposta porque antes fui yo la que lo hizo.
Nos sentamos a comer y devora la comida,realmente tenía hambre. Cuando termina,me mira y vuelve a preguntarme: "Cariño, ¿Sábes qué día es hoy?" Sonrío, me levanto de la mesa y le respondo: "Claro que sí, no podría olvidarlo".
Se pone seria y, esta vez, me dice: "P, en serio, ¿hoy no es un día especial?" Suelto una carcajada, estoy de espaldas a la mesa y no consigo ver su cara, pero me la imagino. Está enfadada.Entonces me acerco a la mesa. Me siento encima de sus piernas e intento tranquilizarla con un beso, pero aparta la cara. Vuelvo a sonreír, y le digo: "Todos los días son especiales para mí. Pero, estoy de acuerdo contigo, hoy es un día especial especial" Pone cara rara, de las suyas, y se echa a reír. Ahora la que pone una mueca soy yo, pero parece ser que mi respuesta le ha convencido y me besa. Se ha dado cuenta de que no me he olvidado de este día. Y en ese momento es cuando me pregunta: "¿Cuántos meses van ya?". Sé perfectamente los que son, pero para que no se asuste, piense que son muchos y por miedo, para qué negarlo, le digo: " Eso no tiene importancia, tan solo súmale treinta."

1 comentario: